Desbandados

Mucho tiempo después, volver a reencontrarse con Quique González en un teatro, con el aliciente de ser una gira acústica, íntima, con la magia de los conciertos de siempre y la sorpresa de nuevos sonidos era la mejor manera de combatir el calor de las calles de Madrid. Jacob Regulon al contrabajo, a la guitarra y casi a la voz acompañaron a Quique en un escenario frío,quizás falto de decoración si se tiene el recuerdo de la anterior gira de teatros en el Pilar Bardem de Rivas al qué asistí. Lo bueno que tiene Quique es que siempre sorprende, se reinventa y hace que siempre merezca la pena escucharle en cualquier formato. Nos sigue malacostumbrando con su música y nosotros nos dejamos malacostumbrar..."Hoy fue un gran día"